domingo, 23 de marzo de 2014

PICADA DE LOS SABADOS Matices con manices

29 de marzo de 2014 desde las 19:00 en La Genovesa, Rivadavia y Alem. Junín.
 
Pensar la actualidad


Cuando desde la filosofía planteamos la cuestión de pensar la actualidad surgen algunas preguntas: -¿Qué articulaciones posibles se presentan? ¿Cuáles son los alcances y los campos? -¿Cómo interpelar las prácticas que apuntan a la subjetividad y la política?

El desafío de pensar el presente, además de poner de relieve la temporalidad y lo efímero, apunta a definir territorios donde aplicar el pensamiento. La filosofía de este modo se singulariza. ¿Cómo tratar la tendencia al universalismo de este tipo de saber en condiciones locales?

Al partir de reflexiones sobre el sujeto y las formas de la subjetividad, sobre los dispositivos de saber y poder que marcaran la producción de sujetos en el campo de las prácticas de la modernidad, llegamos a la lectura de las formas del poder iniciada por Foucault sobre dispositivos, tecnologías del yo y el surgimientos de las prácticas de sí en los pliegues de los dispositivos de saber y poder.


Desde nuestra ubicación en el sistema-mundo se abre otro horizonte con la aparición de un pensamiento decolonial que interpreta saberes y prácticas a partir de la herida colonial, cuestionando su reducción a un universalismo eurocéntrico, característico del poder imperial, y discutiendo la colonialidad del saber, la colonialidad del poder, del ser y del tiempo.
En esta nueva etapa buscamos retomar las lineas de pensamiento que fuimos recorriendo durante 2013, y que culminaron con la Jornada de Filosofía del 7 de diciembre pasado, con el proyecto de hacerlo abriendo la cuestión que Santiago Castro Gómez en su artículo “Michel Foucault y la colonialidad del poder” plantea de esta manera. 

La propuesta se completa con una discusión que viene desde las primeras décadas del siglo XX. Es la que proponía la Escuela de Fráncfort cuando planteaba: “como es posible que la forma de reproducción capitalista a pesar de su obvia disfuncionalidad siga existiendo y tenga cada vez mas apoyo popular”. La pregunta casi un siglo después sigue sin respuesta. Es esto así porque los poderes hegemónicos imponen al resto no sólo un grupo de creencias y prácticas, sino que también ponen limites a lo que se puede hacer y pensar, valorando solo lo que fortalece el papel del mercado como agente de regulación social y censurando lo que puede afectar al sistema financiero mundial?, es otra cuestion que puede plantearse.


“A partir del sistema mundo centrado en la modernidad/colonialidad, una representación jerárquica del poder se ha instalado desde el siglo XVI, es el eje de la economía capitalista  y su lógica se reproduce en otros ámbitos de la vida social.”

Los invitamos a compartir esta reunión, la idea es comenzar con un informe breve la la jornada de diciembre y abrir el debate sobre el curso a seguir este año en el que participaremos de encuentros regionales sobre esta temática.


Jorge Alonso, Laura Tortoriello, Mateo Ciampagna

viernes, 7 de marzo de 2014

Acerca de Cornelius Castoriadis: pensador radical de la actualidad de la subjetividad. Homologación o contraste. Comparación con Lacan y Foucault

Jorge Alonso

Ponencia presentada el jueves 7 de noviembre de 2013, a las 19:30 horas, en el Instituto Superior del Profesorado “Dr. Joaquín V. González, en conmemoración del día del “Oji”, organizado por la asociación Cariatide, Asociación Argentina de cultura helénica, cuya convocatoria era “Grecia revisitada: Cornelius Castoriadis pensador radical de la actualidad”. Integraron la mesa: Liliana Ponce, Raul Oller, Jorge Alonso, moderador Jerónimo Brignone.

Entrada
Pensar la actualidad de la subjetividad y los sujetos desde un pensamiento radical, partiendo de  Castoriadis, invita a unos breves recorridos, referencias y relaciones con otros autores, Lacan y Foucault que contemporáneos a Castoriadis van a plantear creo yo, en sus elecciones temáticas, de citas, de autores y de prácticas, y en relación al sujeto, una atracción hacia los griegos, hacia los orígenes, pero en la particularidad en que los griegos se remiten al origen, en su indeterminación, haciendo estallar la idea de un universo seguro, natural y ordenador como presupuesto. Han aportado, por consiguiente, componentes del pensamiento griego, al pensamiento de la actualidad del sujeto y la subjetividad, y de cómo la cuestión del vaciamiento del origen plantea formas en que los sujetos  tratan con ello, y que implicancias tiene. La presencia o desaparición del sujeto en nuestros tiempos permite ser pensada de esta forma.

Castoriadis
Castoriadis pensador radical de la actualidad, tanto de la subjetividad y como de la política. Lleva algunos planteos hacia los extremos para poder ver mejor. Si pensar la realidad es pensar todas las presentaciones y representaciones que nos podamos hacer acerca de todo, habría que delimitar entre lo determinado y indeterminado, y desde ahí poder desprender lo clasificable y ordenable, etc., pero siempre abierto a lo indeterminado. Sería el modo de pensar la autonomía psíquica y social.
Castoriadis en el libro Los dominios del hombre Las encrucijadas del laberinto, en La lógica de los magmas y la cuestión de la autonomía, escrita en mayo-junio de 1981, cita  una carta de Cantor a Dedekind del 28 de julio de 1899 quien hace una distinción lógica que le permitirá separar en el campo de los conjuntos lo determinado, pero abierto a lo indeterminado, (minimizando la cuestión de lo finito y lo infinito)
“toda multiplicidad es o bien una multiplicidad que es inconsistente o bien es un conjunto. Decir de una multiplicidad que es inconsistente implica, por cierto, que esa multiplicidad es: ella es, de una manera que hay que precisar y que Cantor no precisa. Resulta claro que no se trata del conjunto vacío en el cual es un conjunto de pleno derecho y con su lugar dentro de la teoría de los conjuntos (CC,2005,193)
En la Institución imaginaria de la sociedad, Castoriadis afirma que “lo que es, en cualquier dominio, se presta a una organización identitario-conjuntista y no es congruente con ésta en su totalidad y en última instancia”. (CC,2010,429). Y continúa su pensamiento respecto de la distinción entre lo identitario-conjuntista y la idea de totalidad diciendo que:
Toda ordenación en conjuntos, toda categorización, toda organización que en ello instauremos-descubramos, tarde o temprano se demuestra parcial, lacunar, fragmentaria, insuficiente, e incluso, que es lo más importante, intrínsecamente deficiente, problemática y, finalmente, incoherente.  (CC,2010,429)
De este modo plantea una distinción entre lo determinado y lo indeterminado. Al analizar la cuestión de la psique y de lo histórico social dirá que se trata de “dos expresiones  de lo imaginario radical: allí, como imaginario radical; aquí como imaginario social” (CC,2010,430). Castoriadis analiza la institución histórico-social y la psique como imaginación radical, “como emergencia de representaciones o flujo representativo no sometido a la determinidad.

Parece establecer esta distinción en el modo de ser del psicoanálisis. Según Freud el inconciente ignora el tiempo y la contradicción y no constituye un lugar. El inconciente es un flujo indisocialmente representativo/afectivo/intencional y no está sometida a las exigencias de la determinidad. Esta visión contrasta algunas definiciones del inconciente como una estructura lógica, o aquella que lo comparar con una estructura lingüística, donde algunas funciones como la metáfora y la metonimia se asimilan a la condensación y desplazamiento en el sueño.
La índole de la psique es génesis de representaciones, a partir de una cantidad ínfima de representaciones arcaicas que eran el mundo, a partir del cual comienza un largo trabajo de formación del individuo. Desde una fusión e indistinción al origen hacia una lógica identitaria, de  un magma representativo-imaginario del inconciente, hacia un esquema de la discreción, la identidad y la separación. “En este sentido la representación es en realidad inanalizable”. “Toda descomposición en elementos es aquí un artefacto provisional, toda imposición de esquemas separadores-unificadores es un torpe intento de abarcar un ente en la indefinidad de dimensiones con unos pocos jirones que se le han arrancado.”(CC,2010,434) “El abismo que separa la indefinidad de la representación del infinito matemático del orden más elevado, es más profundo todavía que el que separa el infinito matemático de un número banal” (CC,2010,434)
Respecto de la asociación libre dirá que no se trata de una relación, no supone un orden necesario, ni una correspondencia en el sentido de la teoría de los conjuntos.
La representación dirá que lo único que da es “la multiplicidad inconsistente” de la que hablaba Cantor, las determinaciones no son ni decisivas, ni indiferentes, solo puntos de apoyo para la marcha del discurso. En la representación dirá “lo obligatorio es trivial y vacío, y lo imposible casi no existe” (CC,2010,435)
“la verdadera interpretación del sueño es una empresa específica, en un contexto práctico-poético singular, el del análisis; las correspondencias que éste establece entre representación y sentido sólo tienen valor en el contexto del análisis, pero no son generalizables, ni transportables, ni tampoco verificables en la acepción aceptada de este término. No quiere decir esto que sean arbitrarias, que puedan decir cualquier cosa; pero su significación puede ser constantemente retomada, y en un análisis digno de tal nombre, siempre lo es en teoría; sólo existe para el sujeto analizado, sujeto enigmático por excelencia, desconocido, que no es el paciente tal como es, ni el paciente tal como debiera ser según una norma fijada de antemano, sino el paciente tal como se hace y se hará en y por el proceso analítico.” (CC,2010,438)
Castoriadis se interrogará acerca del valor de la interpretación, y de la producción del sentido como se ve en el párrafo anterior, pero en cuanto al modo de ser del inconciente, apoyándose en Freud, a quien cita: “todo sueño tiene por lo menos un lugar en el que es insondable, como un ombligo, por el cual está unido al inconciente (CC,2010,438) “un nudo imposible de desatar, algo que no tiene acabamiento, indeterminado, apeiron, indefinido, condensación de lo que es inaprensible, articulación de lo que no se deja articular. ¿Cuál es el sentido de la interpretación? Sentidos contradictorios, deseos incompatibles, ambivalencia de los afectos.
La producción de distintas representaciones, de distintas conciencias, de distintos retazos, que va a requerir la puesta en funcionamiento del esquema de la separación, al servicio de cual aparecerán las instancias psíquicas. Entraríamos de este modo en la lógica identitaria.
Sin embargo, Castoriadis cuando se interroga acerca del modo de ser del inconciente, señalará:
La alógica del inconciente es, pues, algo completamente distinto que la yuxtaposición de diversos ejemplares diferentes de la misma lógica. El inconciente no depende de la lógica identitaria ni de la determinidad. Producto y manifestación continua de la imaginación, su modo de ser es el de un  magma. (CC,2010,441)

Lacan
Hay una contemporaneidad de Castoriadis con ciertos planteos y anécdotas que incluye a otros pensadores franceses, y que se anuda alrededor del mayo francés. Por un lado, Lacan y por otro a Foucault.
En una conversación en los escalones del Panteón entre Lacan y un grupo de discípulos, responde algunas preguntas, ya que no puede hacer su seminario porque está cerrada la facultad de derecho. Vienen hablando de los aportes que pueden significar en el campo de la filosofía, la enseñanza de Lacan que el dice que surgen de su experiencia analítica. Le preguntan: “lo que usted dice está siempre descentrado en relación al sentido, usted rehuye el sentido” (JL, 1992, 157) El responde y curiosamente mencionará a Castoriadis dando una respuesta contrastando su enojo y coincidencia con Cornelius.
Allouch interpreta que luego de que Foucault promulgara su conferencia ¿Qué es un autor? el 22 de febrero de 1969, a la que asiste Lacan, Lacan inicia su Seminario El reverso del psicoanálisis, el 10 de diciembre de 1969. En ese seminario, el 13 de mayo de 1970, Lacan apunta a Castoriadis como hemos mencionado, con quien mantiene un desacuerdo. En La institución imaginaria de la sociedad, en el prólogo de 1974, Castoriadis  refiere que los estudios sobre psicoanálisis son realizados entre 1965  y 1968. Allouch dirá que Lacan continuó a Foucault, y desarrolló los cuatro discursos y estableció una diferencia entre el discurso del amo y el discurso del analista. Allouch planteará que Foucault no lo sigue en esa y su camino planteará otra perspectiva. Luego del análisis del poder, del poder de soberanía, del poder disciplinario (entre otros el poder psiquiátrico),  y de la gubernamentalidad, dirá que más allá de esos dispositivos de poder que se observan en el sujeto hay otros dispositivos del yo que resisten a aquellos. Para introducir estas cuestiones irá a los orígenes a los griegos, y planteará las cuestiones de la espiritualidad.
En el libro  El psicoanálisis ¿Es un ejercicio espiritual? Respuesta a Michel Foucault, Allouch toma alguno de los últimos cursos de Foucault para decir que el psicoanálisis tiene una genealogía, y que en esa genealogía se encuentran las escuelas griegas, estoicas, epicureas, cínicas y repasará algunos elementos comunes, como el dinero, la transmisión, el pasar por el otro, la salvación, la catarsis, el flujo asociativo. Pero además planteará que hay una distancia muy grande entre la función psi, el poder psi, en términos de Lacan el sujeto supuesto saber, y el psicoanálisis y postula que el psicoanálisis no pertenece a ese proyecto de la ciencia y que más bien debe alejarse.

Foucault
Tomamos un fragmento de Frédéric Gros comentando a Foucault en la situación del curso en La hermenéutica del sujeto donde dice que “Foucault pronto afirmará que su principal preocupación no es el  problema del poder sino del sujeto, y lo es en sus escritos desde hace más de veinte años: surgimiento del sujeto a partir de prácticas sociales de división (Historia de la locura y Vigilar y castigar, sobre la construcción del sujeto loco y el sujeto criminal); surgimiento del sujeto en proyecciones teóricas ( Las palabras y las cosas, sobre la objetivación del sujeto que habla, vive y trabaja en las ciencias del lenguaje, de la vida y de las riquezas);  por último, con la Historia de la sexualidad, “nueva fórmula”: El surgimiento del sujeto en las prácticas de sí, en vez de ser constituido por técnicas de dominación (poder) o técnicas discursivas (saber).” (MF, 2006:484)
En La Hermenéutica del sujeto de Foucault, Curso de 1982 surge una nueva tensión del sujeto. La inquietud de sí, Epimeleia heautou, Cura sui, y por otro lado el sujeto del Conócete a ti mismo, Gnothi seauton. En este texto, Foucault realiza  una historia de la práctica de la subjetividad: Forma de filosofía, de ejercicios, de prácticas filosóficas o espirituales.
Ocuparse de si mismo, cuidar de sí, retirarse hacia sí mismo, retrotraerse en sí mismo,  complacerse en sí mismo, no buscar otra voluptuosidad que la que hay en uno mismo, permanecer en compañía de sí mismo,  ser amigo de sí mismo, estar en sí mismo como en una fortaleza, rendirse culto, respetarse”. (MF, 2006:30)
Aparecen con la moral estoica, cínica y epicúrea. “Su ocultamiento se debió en parte al carácter egoista frente a la moral cristiana y moderna” (MF, 2006:31), pero sobretodo por la razón que Foucault denomina el momento cartesiano, dentro del problema del sujeto y la verdad, que recalificó el Conócete a ti mismo, Gnothi seauton  y descalificó La inquietud de sí, Epimeleia heautou.
Las diferencias  entre Filosofía y espiritualidad.  Filosofía: “forma de pensamiento que se interroga acerca de lo que permite al sujeto tener acceso a la verdad, que determina las condiciones y límites del acceso a la verdad del sujeto, del sujeto a la verdad.” (MF, 2006:33)
Espiritualidad:  “la búsqueda, la práctica, la experiencia por las cuales el sujeto efectúa en sí mismo las transformaciones necesarias para tener acceso a la verdad. Las búsquedas , prácticas, experiencias que pueden ser las purificaciones, las ascesis, las renuncias, las conversiones de la mirada, las modificaciones de la existencia, que constituyen no para el conocimiento, sino para el sujeto, el precio a pagar por tener acceso a la verdad. (MF, 2006:30) El recorrido permite situar con mucho detalle el concepto de sujeto, por sobre los demás, asimismo que articula los conceptos de sujeción y subjetivación.
El poder disciplinario es un concepto desarrollado por Michel Foucault para describir el poder político desde un punto de vista antagónico al de la teoría clásica del poder, que construye sus modelos de análisis  a partir de la soberanía. Esta tipología, según Aristóteles, se construye en función de cuantos individuos detentan dicho poder (monarquía, aristocracia y democracia o tiranía, oligarquía y demagogia).
 Foucault, heredero de otro legado teórico, observa el poder desde un punto de vista opuesto. No desde formas terminales (instituciones consolidadas), sino desde sus formas capilares, sus “raíces fundacionales”.
 Este poder no soberano, diferente a la forma de soberanía, es el poder disciplinario. Foucault ubica el nacimiento u origen de este poder en el siglo XVII, con el desarrollo de la economía y la industria. La vieja mecánica de poder se veía impotente ante los nuevos cambios y las relaciones entre los individuos que se generaban. Por eso surge un nuevo mecanismo, la disciplina.
El poder, que tenía como modalidad, como esquema organizativo, la soberanía, se hubiera visto incapaz de regir el cuerpo económico y político de una sociedad entrada en una fase de explotación demográfica y de industrialización, de modo que a la vieja mecánica del poder se le escapaban muchas cosas, por arriba y por abajo, a nivel de los individuos y a nivel de las masas. Para recuperar  lo particular tuvo lugar una primera adaptación de los mecanismos de poder, dirigida a la vigilancia y el adiestramiento. Nace así la disciplina. Por eso entre los siglos XVII y XVIII, fue el primero realizado, aunque sólo a nivel local, en forma empírica, fraccionada y en el marco limitado de la escuela, el hospital, el cuartel, la fábrica. “El  objetivo del Poder disciplinario es, en pocas palabras, manipular el cuerpo como un conjunto de fuerzas que deben volverse útiles y dóciles”.  (MF, 2005:66)
La disciplina, a diferencia de la soberanía, no gira en torno a la regla jurídica, sino a la regla natural, a la norma y por lo tanto, su código no es el de la ley sino el de la normalización y se caracteriza por ser creadora de aparatos de saber y conocimientos.

Castoriadis plantea el proyecto de autonomía psíquico y social, y cierta forma de articulación de este proyecto. Pero además hay un planteo de que dicha autonomía está dada por la lógica de la determinación (lógica identitaria) y la indeterminación (abierta a la autonomía).

Salida
Quiero remarcar una diferencia entre estos autores. En Castoriadis, parece que la subjetividad es de un mismo orden que lo colectivo, entre el sujeto y el campo social hay una especie de continuidad y homologación. En Lacan, hay un contraste, al menos entre el discurso del Amo y el discurso analista, ambas discursos antagonizan y promueven cosas diferentes para el sujeto. Foucault las referencias al sujeto son en relación a las posibilitades de resistencia al poder.

Quiero aventurar una similitud. La corrida a hacia los griegos, como hacia los orígenes es una forma habitual de los filósofos, particularmente los que estamos analizando. Sin embargo, lo que van a encontrar en ese lugar de los orígenes, es la relación con la indeterminación en el origen de la cosas. Un modo, de hacer estallar la idea de un universo seguro, natural y ordenador como presupuesto. De esto último creo que estos autores, Castoriadis, Lacan y Foucault, coincidieron en sostener en su pensamiento, aportando desde el fondo del pensamiento herramientas radicales para pensar la actualidad.

Bibliografía
Castoriadis Cornelius Los dominios del hombre Las encrucijadas del laberinto, en La lógica de los magmas y la cuestión de la autonomía. 4° reimpresión. Gedisa. Barcelona 2005.
Castoriadis Cornelius La Institución imaginaria de la sociedad. Buenos Aires, Tusquets, 2010.
Lacan Jacques El reverso del psicoanálisis Paidós Buenos Aires, 1992.
Allouch Jean, El psicoanálisis ¿Es un ejercicio espiritual? Respuesta a Michel Foucault. El cuenco de plata. Buenos Aires, 2007
Foucault Michel, La hermenéutica del sujeto. FCE Buenos Aires, 2006